Testimonios
Trabajar junto a las familias enriquece y bendice mi vida de maneras infinitas, y cada vez que recibo un comentario de agradecimiento me confirma que éste es mi propósito.
Abandoné mis culpas
Si me piden que hable del autismo ahora mismo puedo escribir mil libros y cada uno tendria un significado distinto. Asi mismo como nuestros hijos son neurodiversos, asi mismo nuestras emociones a través del tiempo.
Luchar contra corriente es agotador y mas cuando no conoces tu oponente. Podria decir que asi me sentia en un principio, llevando una batalla contra algo a lo que no me detuve a conocer sino mas bien eliminar creyendo que era más facil. Al llegar a soporte a padres era aquella madre desesperada que gracias al favor de Dios llegó al lugar correcto, donde pude dejar mis cargas de culpa, sentirme plenamente apoyada y sobre todo amada a pesar de sentirme como una muñeca rota.
He aprendido a cruzar mis mayores puentes: el miedo y la tristeza, porque sé que aunque ahora mismo no siento estas emociones pueden ir y venir pero ya no encontraran a la misma persona. Una mama que ha elegido aprender a estar bien y lo que implica el autocuidado y amor propio para que sus hijos estén bien y todo eso es gracias a SOPORTE A PADRES.
Lo importante de todo es que existe este grupo de apoyo, que existen personas interesadas en guiarte, a las cuales Dios pone esos corazones nobles en tu camino para que no te sientas solo asi podria describir yo al grupo de soporte a padres.
Muchas gracias por el tiempo, por los consejos, las informaciones pero aun más en poner el amor en cada palabra. Desde mi corazón agradecido Dios le bendiga mucho y que continue su labor en favor de tantas madres.
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Raulina Leonardo
Aprendí a valorarme
Le agradezco a Michelle por crear este grupo. Los grupos de apoyo a padres son terapias para mi y donde obtengo información para mejor ayudar a mi niña. Antes de empezar a participar en grupos de apoyo a padres llegue a creer lo que algunas personas decian, que mi niña era como era por mi culpa y que yo no sabia ser buena madre. Eso me dolió mucho pero pensé que quizás era así, ya que mis métodos no estaban dando resultando.
Cuando empece a escuchar las historias de otras madres, empecé a aprender acerca del autismo y empecé a valorarme y ver que yo hago mas de lo que puedo para ayudar a mi niña y no soy una mala madre por tratar de entender y proteger a mi niña. Entiendo que nadie conoce mejor a mi niña que yo y por eso mi deber es hacer todo lo posible para ayudarla a tener una buena calidad de vida sin importar lo que los demás piensen de mi ya que no le hago daño a nadie.
Otra razón por la cual tomé la iniciativa de participar en grupos de apoyo a padres fue para ayudar a mi familia a entender y a aprender acerca del autismo, ya que es algo nuevo para todos en mi familia. Gracias Mitchelle
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Judieth
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